Estás en tu recamara a punto de dormir y te das cuenta que olvidaste apagar las luces de la estancia principal. El cansancio no te deja levantar, pero recuerdas que puedes apagarlas desde tu celular, incluso, programar su encendido a cierta hora de la mañana. ¿Te suena irreal? ¡Las luces inteligentes te permiten eso y más!
La domótica puede brindarte muchas comodidades dentro de tu hogar. Además, representa una excelente forma de evitar gastos innecesarios en energía u otros recursos naturales, gracias a la programación.
Lo sabemos, las luces inteligentes pueden parecer un lujo, pero no es así. En realidad, un buen uso de ellas garantiza un ahorro a largo plazo. Otras ventajas son:
1. Muchas luces en una
Las luces inteligentes tienen hasta 16 millones de colores RGB para elegir. Así, puedes iluminar las distintas salas de tu hogar con la luz que necesites para cada momento, sin tener que cambiar los focos.
2. Fáciles de instalar
Los focos inteligentes tienen el mismo tamaño y la misma rosca que las lámparas de antaño, por lo que se adaptan a cualquier portalámpara sin necesidad de acondicionarla.
3. Favorecen la seguridad
Además de funcionar con sensores de movimiento, son una alternativa interesante cuando no hay nadie en el hogar. Puedes configurarlas para que enciendan y apaguen a ciertas horas del día, así parecerá que la vivienda sigue ocupada.
4. Ahorran energía
Este tipo de iluminación funciona con luces LED, las cuales duran más tiempo, ahorran energía e iluminan mejor. Tal vez no lo sabías, pero los diodos led transforman el 80-90% de la energía consumida en luz, mientras que una lámpara tradicional incandescente solamente convierte en luz el 10-15% de la misma energía.
5. Brindan comodidad
Las personas que tienen una rutina establecida de lunes a viernes —o fines de semana—, pueden programar su iluminación para que responda a esos horarios, así como a los tiempos de salida y entrada a su casa.
Recomendaciones
Lo primero que debes pensar es en qué parte de tu casa funcionarían mejor y por qué. Tal vez sólo necesitas un foco en la entrada que alumbre cuando perciba un movimiento; o algo más avanzado, como un sistema de iluminación completo para controlar a distancia cada foco de tu hogar. Sea como sea, no olvides:
- Aprovechar la luz natural. Si lo que quieres es ahorrar, sácale provecho a la luz que entra por las ventanas durante el día.
- Distribuir los puntos de luz. Piensa en cómo vas a distribuir los focos para que no queden mal iluminados los rincones.
- Evitar el exceso de luz. No te quedes corto, pero tampoco te pases. Un exceso de iluminación puede ser causa de fatiga y problemas de visión.
Si en este momento rentas una casa o departamento, elige lámparas o sistemas de iluminación que puedas llevarte al finalizar tu contrato. Recuerda, lo ideal es plasmar tu personalidad en cada espacio sin tener una pérdida a la hora de mudarte.
Considera que todos los cambios de tu hogar deben apegarse a tu situación como arrendatario o propietario del inmueble. Si has decidido dejar de pagar renta para invertir esa mensualidad en una casa propia, acércate a Yave.
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