Tener un hogar propio es uno de los objetivos más importantes para muchas personas, pero dar ese paso requiere cumplir con ciertos requisitos financieros. Uno de los factores más críticos que las instituciones consideran al evaluar una solicitud de crédito hipotecario es el nivel de ingresos del solicitante.
Determinar si tus ingresos son suficientes para acceder a un crédito puede parecer complejo, ya que el ingreso mínimo requerido depende de varios elementos, como el valor de la propiedad y las políticas de la entidad financiera. En este artículo, exploraremos cómo se calcula este ingreso mínimo y cómo ciertas alternativas innovadoras —como la coacreditación— pueden facilitar el camino hacia la obtención de un crédito hipotecario.
Regla del 30%
Las instituciones financieras suelen establecer que el solicitante destine como máximo el 30% de sus ingresos mensuales al pago de su hipoteca, un parámetro conocido como capacidad de pago.
Por ejemplo, si una persona desea adquirir una propiedad cuyo pago mensual es de $15,000 —y la institución financiera establece que el pago de la hipoteca no debe exceder el 30% de sus ingresos mensuales—, el ingreso mensual necesario sería de $50,000.
En muchos casos, los bancos u otras entidades financieras pueden exigir un ingreso mínimo específico que varía según el monto del crédito solicitado y el plazo del préstamo. En general, el ingreso mínimo mensual para obtener un crédito hipotecario puede oscilar entre $20,000 y $30,000, aunque esto varía según la entidad y las condiciones específicas del crédito.
Factores adicionales que influyen en el ingreso mínimo
1. Monto del crédito solicitado: Cuanto mayor sea el monto solicitado, mayor será el ingreso mínimo requerido. Esto se debe a que los pagos mensuales serán más altos y, por tanto, la capacidad de pago debe ser mayor.
2. Plazo del crédito: Un plazo más largo puede disminuir el pago mensual, lo que a su vez podría reducir el ingreso mínimo necesario. Sin embargo, un plazo más extenso también implica más intereses pagados a lo largo del tiempo.
3. Relación deuda-ingreso: Las instituciones financieras revisan cuánto de sus ingresos ya está comprometido con otras deudas. Si una persona tiene una alta relación deuda-ingreso, podría requerir un ingreso más alto para calificar para un crédito hipotecario.
Otras alternativas para cumplir con el ingreso mínimo
Para quienes encuentran difícil cumplir con el ingreso mínimo requerido, existen algunas alternativas. Una opción es coacreditar, es decir, solicitar el crédito junto a otra persona, como un cónyuge, un familiar e, incluso, un amigo. Al sumar los ingresos de ambas partes, es posible cumplir con el requisito de ingreso mínimo y aumentar las probabilidades de aprobación del crédito.
Conoce más: Crédito hipotecario: Cómo comprobar ingresos como freelance
Yave: Una solución innovadora
En Yave ofrecemos una solución innovadora para quienes buscan obtener un crédito hipotecario, pero tienen dificultades para cumplir con el ingreso mínimo. Yave te permite coacreditar hasta con 5 personas, lo que amplía significativamente la capacidad de comprobación de ingresos. Esta opción no sólo facilita el acceso a un crédito hipotecario, también permite obtener mejores condiciones en el préstamo.
Gracias a esta posibilidad, más personas pueden cumplir su sueño de adquirir una vivienda, incluso si sus ingresos individuales no alcanzan el mínimo requerido por las instituciones financieras tradicionales.
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