El coliving se originó en Silicon Valley, Estados Unidos, al producirse una escasez de vivienda que chocaba con la multiplicación de jóvenes profesionales que llegaban a San Francisco a trabajar. En ese momento, aparecieron edificios en los que los inquilinos no sólo compartían zonas comunes, también sus aficiones y experiencias laborales.
A decir de expertos inmobiliarios, el coliving es una extensión o evolución del coworking en el mercado de la vivienda, que dota de espacios a los residentes, generalmente profesionales afines. Este modelo está diseñado para que las personas interactúen con los demás, dotándolos de zonas comunes, como sala de cine, sala de juegos, biblioteca, comedores, gimnasio, entre otros.
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"Estos espacios funcionan como laboratorios de ideas de jóvenes emprendedores, que se unen para desarrollar proyectos en poco tiempo, conviviendo tanto en el trabajo, como en su vida privada y generando, de esta manera, fuertes sinergias entre sus proyectos. De esta manera, se acelera el proceso de creación del concepto y el desarrollo y puesta en marcha del mismo", explicó Patricio Palomar, consultor de inversión en AIRE Partners.
Coliving en México
El coliving llegó a México desde hace algunos años. Hoy en día, tanto emprendedores como freelancers sólo necesitan una computadora y una conexión a Internet para poder trabajar. Además, cuentan con el interés común: ahorrar gastos.
Gracias a esto, surgieron las viviendas coliving en muchas partes de nuestro país, que hacen que estos nuevos profesionistas cuenten con todo lo necesario para su vida diaria en un solo lugar, logrando un ahorro tanto de dinero como de tiempo, al compartir gastos de servicios y olvidarse del transporte para trasladarse a otros lugares de trabajo.
Comprar para rentar
Como ya te hemos contado con anterioridad, comprar un inmueble para iniciar un negocio puede traerte muchas ventajas, incluso si lo haces a través de un crédito hipotecario. Una de ellas es que puedes utilizar el dinero de la renta para cubrir tu pago mensual del crédito hipotecario, así la casa “se pagará sola” y no tendrás que desembolsar dinero para esta compra —sin dejar de lado los gastos iniciales del crédito hipotecario—.
Además, si la renta que recibes es mayor a la mensualidad que debes pagar por el crédito hipotecario, puedes liquidar el préstamo antes de cumplir el plazo. Para ello, te recomendamos elegir una institución financiera que no cobre por pagos adelantados, como Smart Lending, ahora Yave.
Recomendaciones
Es sumamente importante que consideres la ubicación del inmueble, recuerda que la zona en la que se ubique la propiedad determinará qué tan rápido se arrendará. También te recomendamos pensar en el precio del inmueble y el valor de la hipoteca. Un inmueble con un precio elevado requerirá un monto mayor para el crédito hipotecario y, por tanto, una renta elevada —lo que podría complicar el arrendamiento—.
Si tienes dudas sobre cómo comenzar tu búsqueda, contacta a un asesor inmobiliario. Si ya encontraste una propiedad que se ajuste a tus necesidades, considera que la renta deberá ser mayor o equivalente al pago mensual de la hipoteca.
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