¿Alguna vez viste un atractivo anuncio sobre préstamos rápidos y flexibles que te hizo dudar? Esto es muy común al caminar por la calle o al navegar por Internet. ¡Pero cuidado! Si bien existen productos financieros con muy buenas condiciones crediticias, es sumamente importante que te informes para evitar caer en engaños que te hagan perder dinero.
1. Verifica que sea una institución autorizada
Aunque la institución financiera se presente como una empresa debidamente constituida y certificada, es esencial que verifiques si se encuentra registrada ante las autoridades competentes.
- Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), si se trata de entidades financieras.
- Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), en caso de establecimientos comerciales que operan como gestoras.
2. Desconfía si solicitan una comisión por solicitud de crédito
Las empresas falsas suelen pedir una comisión por solicitud de crédito, misma que no es reembolsable en caso de que resulte “negativa”. Nunca proporciones dinero por otorgamiento de un crédito, ni por concepto de seguro, comisión o gestión. Recuerda que las instituciones financieras reales no solicitan este tipo de requisito.
3. Investiga antes de entregar documentos
Antes de entregar información personal, verifica que sea una entidad financiera autorizada. Por ningún motivo entregues documentos personales como: credencial de elector, CURP o número de tu tarjeta de crédito o débito, si no estás seguro de que se trata de una institución autorizada o empresa seria.
4. Analiza las condiciones crediticias que te ofrecen
No te dejes deslumbrar ni realices depósitos por concepto de “autorización”. Asegúrate que el otorgamiento del financiamiento es viable e identifica las comisiones asociadas al préstamo, así como la tasa de interés que te cobrarán durante el plazo del crédito. Esto te permitirá tener los elementos iniciales para saber cuánto te costará el crédito.
5. Investiga a fondo la institución financiera
No proporciones información ni realices operaciones a través de Facebook, WhatsApp o cualquier otra red social. Si es una institución que opera en oficinas, acude a verificar; si su servicio es online, busca si existen recomendaciones de los usuarios u opiniones en Google.
Sí, siempre y cuando se trate de instituciones financieras autorizadas. Para saber si un crédito en línea es tu mejor opción, debes preguntarte para qué quieres el dinero y si es urgente. También debes considerar cuánto te va a costar y si realmente puedes pagarlo.
Aunque los préstamos en línea tienen mala fama, un proceso online puede ofrecer mayores beneficios a los otorgados por la banca tradicional. Te recomendamos comparar las opciones disponibles en el mercado.
Yave es una Sociedad Financiera de Objeto Múltiple (Sofom) regulada por la Condusef. Para comprobarlo, ingresa al Registro de Prestadores de Servicios Financieros (SIPRES), da clic en "Buscar instituciones" y escribe Yave (clave de registro: 695066).
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